El equipo Vallkirias llegó a Trasona, el escenario del campeonato, lleno de emoción y determinación. A pesar de ser su primera competición, todas estábamos listas para dar lo mejor de nosotras en la modalidad BCS, representando a las mujeres que han padecido cáncer de mama.

Bajo la atenta mirada de nuestros valiosos entrenadores y, en particular, de nuestro gran entrenador Narciso Suarez, nos preparamos para enfrentar el desafío con confianza y fuerza. Su experiencia y apoyo incondicional fueron fundamentales para nuestro progreso y desempeño en la competición.

Adrenalina y emoción

El día de la competición, el ambiente estaba lleno de adrenalina y emoción. Nos dirigimos a la línea de salida con determinación, sabiendo que estábamos compitiendo no solo por nosotras mismas, sino también por todas las mujeres que han pasado por la batalla contra el cáncer de mama.

En la carrera semifinal, demostramos nuestra valía al partir desde la última posición y remontar al segundo lugar. Con un tiempo impresionante de 1 minuto y 13 segundos, aseguramos nuestro puesto como finalistas. Fue un logro significativo para nuestro equipo y un testimonio de nuestro arduo trabajo y dedicación.

Durante todo el campeonato, sentimos el apoyo y el ánimo de nuestros compañeros, otros equipos y el público presente. Nos unimos en un espíritu de solidaridad y admiración mutua, reconociendo la lucha y la superación que cada una de nosotras ha experimentado.

Al finalizar todas las carreras, se llevó a cabo un emotivo homenaje a todas las personas que han perdido la vida debido al cáncer de mama. Nos unimos en los Barcos Dragones, lanzando claveles al agua en un gesto de respeto y recuerdo para todas ellas. Fue un momento de profunda conexión y reflexión, recordándonos la importancia de nuestra misión y la fortaleza de la comunidad que hemos formado.

Ganas de más

A pesar de no haber alcanzado el primer lugar en esta ocasión, nos sentimos orgullosas y satisfechas con nuestro desempeño. La experiencia de competir y representar a todas las mujeres que han enfrentado el cáncer de mama nos ha dejado una profunda sensación de gratitud y propósito.

Este evento nos ha impulsado a seguir entrenando arduamente, superando obstáculos y trabajando juntas para alcanzar nuevos logros. Estamos ansiosas por el futuro y las oportunidades que se nos presentarán para continuar promoviendo la importancia del deporte y el apoyo a las mujeres que han pasado por esta enfermedad.

Con el apoyo continuo de nuestro increíble entrenador, Narciso Suarez, y el espíritu unido de nuestro equipo Vallkirias, sabemos que podemos enfrentar cualquier desafío que se nos presente. Estamos decididas a seguir dando lo mejor de nosotras en cada competición y a seguir siendo un símbolo de esperanza, fortaleza y resiliencia para todas las mujeres que han enfrentado el cáncer de mama.